Vista satelital de The Skipper, superpetrolero interceptado y confiscado la semana pasada con unos 1,85 millones de barriles de petróleo pesado de origen venezolano, vendidos por PDVSA. Fotografía: Ventor / Redes Sociales.
Guacamaya, 15 de diciembre de 2025. Datos de seguimiento marítimo revelan que varios buques petroleros con destino a Venezuela han dado vuelta atrás luego de la incautación por parte de Estados Unidos de un navío con crudo venezolano la semana anterior. La información difundida por Reuters destaca que un petrolero que transportaba combustible y al menos cuatro superpetroleros que recogerían cargamentos de crudo se desviaron.
La acción de la semana anterior tuvo lugar contra una embarcación que transportaba crudo venezolano, y fue ejecutada por la Guardia Costera y la Marina estadounidense en aguas del Caribe. El barco confiscado portaba una falsa bandera de Guyana y, según datos de funcionarios estadounidenses, se trataba de The Skipper, sancionado previamente por transferencias ilícitas de petróleo.
En consecuencia, unos 11 millones de barriles quedaron varados en otras embarcaciones y provocó que varios propietarios ordenaran desvíos. El petrolero Boltaris, que llevaba 300.000 barriles de combustible ruso hacia Venezuela, retrocedió y ahora navega rumbo a Europa. Mientras, cuatro superpetroleros que debían cargar crudo en Venezuela han dado vueltas en los últimos días, basado en datos de TankerTrackers.com.
De este modo, las exportaciones de Venezuela están casi paralizadas, salvo envíos de Chevron, operados bajo una autorización previamente concedida por Washington. Estas acciones se desarrollan en medio de las crecientes fricciones entre Venezuela y Estados Unidos, marcadas por el despliegue militar estadounidense el mar Caribe.
Al respecto, el presidente estadounidense, Donald Trump, declaró que mantendrá en secreto sus próximas acciones respecto al petróleo venezolano . “No sería muy inteligente de mi parte decírlo”, señaló en respuesta a la prensa durante un acto un acto en el Despacho Oval.
Posteriormente, hoy lunes, la estatal Petróleos de Venezuela (Pdvsa), denunció un ataque cibernético dirigido a paralizar su operatividad, acción que de ser cierta puede ser vista como posible consecuencia de las declaraciones de Trump.
A su vez, Venezuela extinguió de manera inmediata todos los acuerdos, contratos y negociaciones para el suministro de gas natural a Trinidad y Tobago, país al que señala de estar involucrado en la incautación del buque petrolero la semana pasada.
Desde el pasado mes de agosto, el Pentágono mantiene un amplio despliegue militar en el Caribe, acción justificada como una afrenta de carácter bélico contra las drogas que afectan profundamente la población estadounidense. La combinación de incautaciones, ciberataques denunciados y rupturas comerciales amenaza la estabilidad económica de Venezuela, además de alterar flujos energéticos en la región.







