El embalse del Guri, el más grande de toda Venezuela, donde se encuentra la central hidroeléctrica Simón Bolívar. Fotografía: Cirofono.
Guacamaya, 24 de febrero de 2025. El 15 de febrero Brasil reanudó la importación de electricidad desde Venezuela para proveer al estado norteño de Roraima, según Reuters.
Sería la primera vez desde 2019, cuando se cortó el suministro eléctrico entre las centrales hidroeléctricas del estado venezolano de Bolívar y el país vecino.
El estado de Roraima no está conectado a la red eléctrica nacional de Brasil, por lo que ha dependido de la generación venezolana y, en su falta, de centrales termoeléctricas, usando combustibles fósiles.
Brasília autorizó a la empresa Bolt Energy para importar electricidad a un precio de 1.096,11 reales (192.49 dólares) por megavatio-hora (MWh). La tarifa sería válida de enero hasta abril de este año.
Venezuela estaría generando una media de 82 teravatios-hora (TWh) en 2022, según la Agencia Internacional de la Energía. El 78% sería fruto de las centrales hidroeléctricas, un 15% del gas natural y el 7% del petróleo. La generación solar y eólica no llegaría al 1%.
En 2019, el entonces presidente brasileño Jair Bolsonaro rompió todas las relaciones con el gobierno de Nicolás Maduro. También fue el año del apagón nacional, en medio de la crisis eléctrica en Venezuela.
Con la llegada de Luis Ignacio “Lula” da Silva, no solo se han reabierto las relaciones diplomáticas, sino que varias empresas en Brasil han demostrado interés en Venezuela, en especial en el sector petrolero.