Manifestantes en la Universidad Central de Venezuela el 19 de marzo. Reclamaron salarios, pensiones y becas dignas, así como un presupuesto justo para la educación y respeto a la autonomía universitaria. Fotografía: Provea.
Guacamaya, 19 de marzo de 2025. Trabajadores de varias universidades caraqueñas se han congregado en la mañana del miércoles para reclamar salarios y pensiones dignas al Ministerio de Educación Universitaria.
La marcha fue intergremial, contando entre otros a los profesores y otros empleados de las universidades públicas de la capital. Las principales reclamaciones fueron “salarios dignos, presupuesto justo y respeto a la autonomía universitaria,” según los organizadores.
Los manifestantes, mayormente del a Universidad Central de Venezuela, la Simón Bolivar y la Simón Rodríguez se empezaron a reunir a las 9 de la mañana en la Plaza del Rectorado de la UCV. Los trabajadores y representantes sindicales también fueron acompañados por estudiantes y otros manifestantes. Otra reclamación fueron las becas dignas.
Los sueldos y pensiones del sector público en Venezuela son los más bajos de la región. El salario mínimo llega tan sólo a los 130 Bs, equivalentes a menos de 2 dólares a la tasa del Banco Central de Venezuela. Los ingresos se han complementado con bonos que pueden llegar a sumar más de 100 dólares, pero que no fungen como salario de cara a la seguridad social y los convenios colectivos.

La marcha trató de llegar hasta la sede del Ministerio de Educación Universitaria, pero fue impedida por un retén de la Policía Nacional Bolivariana.
A mediodía, la organización no gubernamental Provea informó que la marcha seguía retenida en la Avenida Salvador Allende, a la altura del Arco Tamanaco, debido a las fuerzas de seguridad que cortaron el paso.
Los centros de estudios como la UCV y la USB son universidades autónomas, lo que significa que aunque son públicas tienen, de acuerdo a la Ley, mayor independencia de los poderes del Estado. Incluso los cuerpos de seguridad externos a estas instituciones no tienen permitida la entrada a dichos recintos.
La Universidad Simón Rodríguez es experimental. Depende más del Estado pero sus organizaciones sindicales y gremiales suelen ser independientes.